logotipo enfermedadprofesional.com

¿Qué son las contingencias profesionales y cuáles son sus ventajas?

Las contingencias profesionales son aquellas causas de bajas laborales que derivan del propio trabajo. Recordemos que tenemos derecho a estar de baja siempre que nos encontremos impedidos para prestar nuestros servicios. Sin embargo, en algunas ocasiones la baja no tendrá una causa laboral. Por ejemplo, si se trata de una indisposición causada por una gastroenteritis o una gripe.

En otras ocasiones, la causa incapacitante sí va a tener origen laboral. Por ejemplo, si nos hemos lesionado cargando peso en el trabajo, o en caso de estrés laboral. Incluso hay situaciones que, por razones de protección, se categorizan como enfermedades profesionales, como el embarazo o la lactancia.

Cuando sufrimos una contingencia profesional tenemos derecho a prestaciones más cuantiosas que cuando la contingencia es común. Además, se nos exigirán menos requisitos para tener acceso a prestaciones y pensiones.

El encargado de determinar si la contingencia causante de nuestra baja es profesional o común será el servicio de salud que nos atienda. Sin embargo, si no estamos de acuerdo con su calificación podemos recurrirla mediante el proceso de determinación de la contingencia causante.

En este artículo vamos a ver la definición de contingencia profesional, ejemplos, cuáles son sus ventajas y cómo podemos recurrir una determinación de la contingencia causante que no nos favorezca. Pero debemos recordar que si hemos sufrido una contingencia profesional y debemos recurrirla o reclamar nuestra pensión o indemnización, el primer paso a tomar debería ser contratar a un abogado especializado en Seguridad Social.

¿Qué son las contingencias profesionales? Definición legal

Realmente no existe una definición legal de las contingencias profesionales, ya que se trata de un concepto jurídico que empleamos para englobar diferentes escenarios. Sin embargo, podemos definir las contingencias profesionales como aquellos riesgos relacionados con el trabajo que se actualizan, provocando una lesión incapacitante.

Si queremos cubrir todos los casos en que se habla de contingencias profesionales también deberemos incluir ciertas situaciones de riesgo, como el embarazo o la lactancia natural.

Por tanto, una contingencia profesional es un riesgo asociado a nuestro empleo que activa la protección del sistema de Seguridad Social. Este se manifiesta mediante la prestación de servicios asistenciales y terapéuticos, pero también en la dispensa de la obligación de prestar servicios (la baja laboral) y la correspondiente compensación económica (prestaciones y pensiones).

Ejemplos de contingencias profesionales

La Ley General de la Seguridad Social (LGSS) define dos conceptos principales en relación con las contingencias profesionales:

  • En primer lugar, los accidentes de trabajo. Se trata de aquellas lesiones súbitas que padece la persona prestando sus servicios laborales. Disponemos de un artículo sobre los accidentes de trabajo donde profundizamos más sobre el concepto, si necesitas más información.
  • En segundo lugar, las enfermedades profesionales. En este caso son procesos de desmejora progresiva, derivados de los procesos y agentes empleados en el trabajo. También disponemos de un artículo donde tratamos en detalle el concepto de enfermedad profesional, te invitamos a consultarlo si necesitas profundizar.

Así, son ejemplos de contingencias profesionales:

  • Tener un accidente yendo al trabajo o volviendo de él.
  • Sufrir un infarto por haber realizado un esfuerzo excesivo en el trabajo.
  • Desarrollar un cáncer por trabajar con sustancias carcinogénicas como el benceno.
  • Resultar lesionado a causa de una agresión por parte de un cliente en un puesto de atención al público.
  • Desarrollar una depresión mayor incapacitante para el trabajo.

Como decimos, también son contingencias profesionales los riesgos durante el embarazo y durante la lactancia, pues se relacionan con el peligro asociado al puesto de trabajo.

Si soy autónomo, ¿tengo cubiertas las contingencias profesionales?

Por supuesto. El art. 316 LGSS determina la obligatoriedad para los autónomos de cubrir sus contingencias profesionales. Esta cobertura es competencia de la entidad encargada de proteger su incapacidad temporal, y determina la obligación de ingresar las correspondientes cotizaciones.

Sin embargo, el concepto de contingencia profesional aplicable al autónomo es más restrictivo que el aplicable a las personas que prestan servicios por cuenta ajena. Aunque incluye el accidente in itinere y aquellos ocurridos como consecuencia directa e inmediata del trabajo realizado por cuenta propia, es posible que algunos accidentes que se considerarían profesionales para trabajadores por cuenta ajena no cuenten como tales para los trabajadores por cuenta propia.

¿Cuáles son mis derechos si sufro una contingencia profesional?

Al padecer una contingencia profesional se pondrá en funcionamiento el sistema protector de la Seguridad Social. Esto implica que recibiremos asistencia sanitaria y prestaciones económicas.

Durante el tiempo que estemos impedidos para prestar nuestros servicios se nos declarará de baja laboral. Deberemos someternos a revisiones médicas, seguir el tratamiento prescrito y abstenernos de realizar acciones que dificulten nuestra recuperación.

A cambio, la Seguridad Social nos pagará una prestación que compensará las rentas del trabajo que no podamos recibir por estar incapacitados. Tal prestación dependerá de nuestro estado de salud, de las reducciones orgánicas o funcionales que padezcamos y de la duración del proceso.

A grandes rasgos, las prestaciones a las que tendremos acceso incluyen:

  • Incapacidad temporal. Cubre bajas médicas de duración inferior a un año (o, excepcionalmente, año y medio).
  • Incapacidad permanente. Cubre situaciones de incapacidad más larga que el antedicho año o año y medio.
  • Lesiones permanentes no invalidantes. Indemniza lesiones permanentes que no tienen incidencia en nuestra prestación de servicios.
  • Muerte y supervivencia. Incluyen el auxilio por defunción, viudedad, orfandad y otras pensiones y prestaciones familiares.
  • Otras prestaciones económicas y sociales.

De nuevo, recomendamos consultar con un abogado laboralista para conocer la integridad de nuestros derechos tras padecer una contingencia profesional.

¿Cuáles son las ventajas de que mi contingencia se declare como profesional?

Existen muchas ventajas asociadas a las contingencias profesionales:

  • No nos van a exigir períodos de cotización para acceder a prestaciones y pensiones.
  • Se nos considerará automáticamente de alta en la Seguridad Social si la empresa no cursó adecuadamente nuestra alta.
  • Nuestra base de cotización será superior de lo que sería con una contingencia común.
  • Se aplicarán porcentajes mayores, e incluso recargos sobre prestaciones, lo que implica que nuestras prestaciones y pensiones serán de mayor cuantía.

En resumen, siempre es mejor que se reconozca que la contingencia causante de nuestra baja es profesional que común. Pero son los servicios sanitarios que nos atiendan quienes deben determinar la contingencia causante. Así que… ¿Qué podemos hacer si califican una contingencia profesional como común?

¿Cómo puedo reclamar si me dicen que mi contingencia es común?

Para estos casos existe el proceso de determinación de la continencia causante. Disponemos de un artículo donde te explicamos detalladamente en qué consiste la determinación de la contingencia causante, por lo que te recomendamos que lo consultes.

Este proceso es de tipo administrativo, pero puede derivar en un juicio si las cosas no salen como es debido. De modo que es importante contar con la ayuda de un abogado de Seguridad Social a la hora de iniciarlo.

¡Haz tu consulta ahora!

logo blanco peq
Enfermedad Profesional es un proyecto de Vínculo Legal. Si necesitas asistencia jurídica te asignamos a los mejores abogados o abogadas de tu zona y un asesor para que te acompañe durante el proceso. Solicita tu consulta ahora y resuelve tus problemas legales.
location